Robin Hood
"Y me ha parecido un coñazo..."
Esta revisión del título de Ridley Scott, nos sitúa en la Inglaterra del siglo XIII, en plenas cruzadas del rey Ricardo Corazón de León, y nos cuenta como uno de los arqueros al servicio del rey volverá a Nottinghan para cumplir una promesa y se convertirá en leyenda.
Hace algunos años, el cine Épico vivía una época dorada, y Gladiator fue sin duda el sumun de este género. Ridley Scott fue su director, al igual que lo ha sido de esta innecesaria actualización del conocido "Príncipe de los Ladrones".
Nos encontramos ante una película con demasiadas pretensiones, una especie de precuela sobre los orígenes del mito, que sin embargo, y a pesar de contar con una ambientación envidiable para el género, no puede evitar resultar pesada y totalmente innecesaria.
Ridley Scott roza el ridículo en demasiadas ocasiones durante esta película, desde el intento por dotar de un tono demasiado serio o intelectual a la historia, hasta por unas secuencias de acción, en las que en busca de la épica se cometen autenticas atrocidades contra la historia, y es que, sin ánimo de soltar spoilers, una de las secuencias más importantes del film evoca al conocido desembarco de Normandía de la 2ª Guerra mundial, pero en lugar de con tanques y minas, a caballo con arcos y flechas...
En definitiva una prescindible película, que a pesar de contar con un aclamado director, y no con menos valorados actores, se queda en un producto pesado, que aún destilando mucha calidad en multitud de aspectos, en su conjunto, ni siquiera llega a ser un digno producto de entretenimiento.
Ahí va un tráiler...
| Tweet |
No hay comentarios:
Publicar un comentario